Una nueva experiencia

Creo que la mejor manera de empezar este post y para contarles de mi maravilloso domingo es preguntarles: ¿Todos sabemos que es una brigada? ¿Todos sabemos que es un equipo? ¿Todos estamos dispuestos a ser agentes de cambio?

Bueno para aquellos que aún no lo saben, una brigada es un grupo de personas las cuales forman equipos para poder llegar así a cumplir una “Gran Misión”, y juntas poder cumplir ese objetivo por el cual trabajarán mes a mes de la mano, dispuestos a poder hacer un gran cambio y convertirse en Agentes de Cambio.

Hoy empecé a formar parte de una, una gran familia la cual de la mano, trabajaremos para poder motivar a un grupo de maravillosos jóvenes a cumplir un gran objetivo final, uno en el que los motivemos a querer hacer algo más ahora, y también algo más cuando ya no estemos con ellos; y convertirse, luego de cumplir un gran objetivo en común, en un agente de cambio para su comunidad y también para nuestra sociedad.

Hoy fui por primera vez a Ciudad de los Niños, un internado de niños varones, que viven juntos como una gran familia (todos ellos, como se llaman y nos llamaron, HERMANOS), y me di cuenta de la calidad humana tan linda de ellos, y la manera tan perfecta en que con nosotros, están dispuestos a poder cambiar algo de ese lugar al cual ellos llaman su hogar, y estoy segura, que tanto para mí como para todos mis compañeros de brigadas se convertirá domingo a domingo en nuestra casa.

Luego de juegos, risas y un momento de pasarla bien; pudimos conocernos y darnos cuenta de las fortalezas y debilidades, las primeras que intensificaremos y las otras que ayudaremos a nuestra manera y con nuestras a ganas a poder convertirlas en actitudes que se puedan cambiar. Nuestros ahora hermanitos menores nos aumentaron las ganas para querer trabajar con ellos. Cada sonrisa de estos niños nos motivó, más aún, a querer formar parte de ellos.

Formar parte de este proyecto me enseñará lo valioso que es ser parte de un grupo, de un equipo, de una BRIGADA, orientada a querer el cambio y valorar en este el formar a nuevas personas interesadas en querer ser más cada vez.

Para terminar les puedo decir que estoy convencida que al final de este año escribiré un post contándoles a todos que logramos cumplir nuestra “Gran Misión”, y que todos juntos hicimos posible ser “Brigadas de Cambio”.

Las heridas sanan

¡¡¡No sufras por haber amado mucho. La vida te dará en quien pongas ese amor otra vez!!!

Duele…

Necesito escribir porque sino siento que me ahogaré en mis propias lágrimas. Dicen que es bueno llorar, así te desahogas, pero qué pasa cuando rompes una promesa, una que se la hiciste a la persona más importante… Esa promesa me la hice a mi misma…

Sé que mis lágrimas no harán que él vuelva, nunca le importaron, pero siento la impotencia más grande en mi corazón, esa que me hace un nudo en la garganta y hace que las lágrimas corran una a una sobre mis mejillas…

Yo aún lo extraño y me es difícil asimilar que en verdad todo terminó (después de tantos meses aún me es difícil hacerlo), pero como hago para olvidarlo y no volver a llorar por él, como me lo prometí hace exactamente 29 días, te extraño, por eso se me hace todo más difícil…

No sé si escuchar tus canciones me hace todo más difícil, o me da la posibilidad de olvidarme de tu recuerdo, que es lo único que ahora me queda. ¿Me recuerdas? Aún te acuerdas de todo lo que en algún momento de magia vivimos… Yo te recuerdo, más seguido de lo que en realidad quisiera…

Cierro los ojos para intentar ya no llorar más, pero sólo vienen a mi mente: tu rostro, tu sonrisa, tu mirada, tus juegos, tu confianza, tus palabras, tus carcajadas, esas veces que caminamos de la mano, las veces que tus manos acariciaron mi rostro y cabello, tu mails, tus mensajes, tus llamadas, tus besos… Ese último beso, de unos labios que no volverán a ser míos…

No es fácil fingir estar bien, no es nada sencillo sonreír cuando por dentro tienes el corazón en pedazos, y cada pedazo tiene escrito cada una de las letras de tu nombre, ese nombre que no aparecerá más en la pantalla de mi celular o de la computadora cuando inicies sesión o te conectes a chat de facebook…

 

Debí copiar algo de ti, aprender a hacer que las cosas no importen. Pero como una vez lo dije y lo seguiré diciendo: YO NO SOY COMO TÚ, YO SI TENGO SENTIMIENTOS.

Así me digan que no me mereces, nosotros no elegimos de quien enamorarnos o por quien darlo todo, y aunque me duela aceptarlo, me enamoré de ti y te di TODO y más de lo que alguna vez di por alguien.

Gracias por no valorar mis esfuerzos, mi confianza, mi respeto, mi sinceridad, pero sobretodo gracias por no valorar MI AMOR… Hoy terminaste de romperme el corazón y lo único que puedo pensar es en… ¿Cómo hago para olvidarte?…

Ps: Aún me haces falta, y tu recuerdo DUELE…

Cero Confianza

Hace ya como dos años que estoy en teoría sola, lo digo así porque  el año pasado viví una etapa bonita, pero que con todas las cosas que pasaron se podría decir que no fue una relación. A pesar de eso, se que hay algo que marca el inicio, y muchas veces el final de que dos personas estén juntas y sobre esto va este post.

Cuando se está en una relación en donde, se supone, ambas partes deben dar el máximo de si, entregar el 100% es cuando aparece lo que llamamos CONFIANZA, esa que nos hace creer hasta lo increíble, hacemos hasta lo imposible, nos hace cerrar los ojos y confiar en nuestra pareja. Esta es la base de que dos personas sigan de la mano, creo yo.

¿Qué pasa cuando de la nada la confianza se va perdiendo? Creo que nunca nada es de la nada, valga la redundancia, siempre hay una de las partes que empieza a dar señales que no se merece más la confianza de la otra; y es cuando una relación empieza el declive y ya una de las dos partes (la que siempre dio de si) se da cuenta que ya no es posible seguir dando al 100% por una relación.

¿Vale la pena lucha? ¿Es mejor darse por vencido? ¿Se puede solucionar?

Son preguntas que en base a lo que signifique la relación para una de las dos personas, será quizá posible que  ésta siga luchando, que siga dando oportunidades y que siga queriendo dar al 100% para así poder tener al lado a esa persona de la que se enamoró y por la que siempre apostó.

Creo que si no luchas pierdes muchas oportunidades, jamás debes darte por vencido, siempre es bueno luchar por lo que creemos tiene una solución, por lo que hemos apostado de manera habitual, si amas con todo el corazón la segundas oportunidades existen y quizá sea posible que se pueda solucionar.

Pero si después de haber dado esa segunda oportunidad, de haber seguido luchando y apostando por lo que se cree real, esta situación no cambia es porque, lamentablemente, y aunque no lo queramos aceptar, la relación llegó a su final, hay un porcentaje que tristemente no volverá a aumentar y es que hay un 0% en confianza.

Si amas, lucha, cree, confía; pero si ya no es posible da un paso al lado, quizá esa persona no era para ti, y mas adelante encontrarás a tu “alma gemela” esa con la que de inicio a fin tendrás un porcentaje perfecto, y porque ambos dieron siempre al 100%.

Aún…

Ya no sé de que manera sacarlo de mi cabeza, hay instantes que es lo único que pasa por mi mente, hay momentos en los que sólo recuerdo cada momento a su lado, que pienso en lo que estará haciendo o si quizá por alguna razón extraña él pensará en mi, o al menos me recordará (sólo lo pienso porque sé que eso lamentablemente no es verdad)

 

Cuando alguien te hace falta se supone que debes buscarlo o al menos hacerle frente a ese sentimiento, pero qué hacer cuando sabes y tienes entendido y ya comprendido que esa persona sólo no quiere volver a saber de ti, que esa persona te saco de su cabeza y corazón, si es que alguna vez me tuviste en el. Me sacaste sin un motivo, se suponía que siempre seríamos amigos.

 

Cuando su recuerdo me invade lo que hago es cerrar los ojos e imaginar que mientras los tengo así él sigue a mi lado y que llegará el fin de semana y lo veré llegar a mi casa, como hace un año, pero cuando nuevamente regreso a mi realidad, esa en la que tú ya no estás, me queda abrir el álbum de fotos que creé ayer donde están las fotos en las que salimos juntos, y aunque parezca mentira en muchas de ellas sonríes (así es, para los que te conocemos raro en ti); también miro esos videos que hice de corazón y sólo para ti, como me arrepiento de que en ese momento en el que pudiste verlos y quizá hubiera visto una reacción en tu rostro, lo desaproveché, como era costumbre mía acepte tus “luego”, pero este luego jamás llegó (como muchos otros)

 No hay manera de cambiar el pasado y que seas nuevamente mi presente, ya entendí que no eres para mi y jamás seremos ese algo más, por lo que luche casi un año, no me arrepiento de todo lo que hice, no pienso que malgasté mi tiempo y menos que lo hice en vano, porque así tuve la magnifica oportunidad de conocerte, de tenerte en mi vida y de que te convirtieras, hasta hoy, en parte de mi corazón.

Sé que nunca me leerás, ni cada una de las líneas que he escrito sin parar para ti, pero siento que al menos así me desahogo, al menos aquí puedo decir lo que siento y no callarlo pero siempre manteniéndote en secreto, eres mi secreto más bonito, el que llenó mi corazón.

 Aún te pienso, te extraño, te imagino, me haces falta y quizá hasta necesito de ti, pero muy a mi pesar ya no estás aquí. Aún no eres esa historia que quiero contar, porque aún no te olvido.

 

Te extraño pequeño…

Retroceder NUNCA

Creo que esa es la frase más cierta que puede existir, cuando inicias algo y en verdad quieres poder ganar debes tener en la mente: RETROCEDER NUNCA, RENDIRTE JAMÁS. Soy de las personas que sienten que si vas a iniciar algo y quieres salir victorioso debes ir hasta el final.

Hoy estoy en una etapa de mi vida, la cual estoy segura comparto con muchos de ustedes, no debo retroceder, ya no está permitido para mi dar un paso hacia atrás. Tengo metas muy claras, eso lo tengo entendido, pero hoy estoy en algo que va más allá de alguna decisión, hoy estoy cumpliendo el reto mas grande mi vida y es el de LIMPIAR MI NOMBRE, que se vio manchado por una serie de intrigas.

 

Sé que debo batallar de manera pausada y dar pasos seguros, como lo vengo haciendo en toda mi vida. Soy una persona sincera, transparente y segura de mi misma, y es momento de callar algunas malas lenguas, esas que sólo emitieron palabras para lastimarme y con sus comentarios a personas que en verdad quiero lamentablemente se vieron involucradas.

No retrocederé, nunca lo he hecho, y menos ahora que quiero que mi nombre esté limpio nuevamente (como toda la vida), tengo el apoyo de personas valiosas, esas en las que puedes contar para todo, para cada movimiento.

El primer paso, y uno de los más importantes, es que “él” sepa esa verdad, la única verdad; para ello tengo el apoyo, indirectamente, de una de las personas en las que él más confía y ayer ésta creyó en mi y no lo defraudaré porque cada palabra que dije es totalmente cierta (yo hablo con pruebas y nunca defraudo a las personas que confían en mi). Estoy escuchando esa canción que me recuerda a ti y me da más motivos para no retroceder, porque sé y como dije en un post anterior << en algún momento si el mundo es justo y la vida es como tiene que ser tendré mi oportunidad para que “hablemos”>>.

Los siguientes pasos son por mi y por ellos,y como ya dije y necesito repetir, NO RETRODERÉ NUNCA NI ME RENDIRÉ JAMÁS.

Ps: Sólo  hay un ser al que jamás se puede engañar, y ese es Dios. Sino eres transparente, para TI, lamentablemente LA VERDAD SIEMPRE SALE A LUZ, las mentiras tienen patas cortas, y la tuya las tuvo.