Hoy pensaba en qué consistía “sentir” algo por alguien y me di cuenta que querer es fácil, porque lo único que se hace es cerrar los ojos y confiar, creer en que ese alguien en algún momento se convertirá en un ser especial que te marcará.
¿Qué pasa cuando te toca olvidar? En ese momento debes de abrir los ojos y darte cuenta que sólo soñaste, porque por ahora para mi querer y darlo todo por alguien es sólo soñar.
Entregarlo todo es sólo hacer o tratar que el sueño se haga real, pero tarde o temprano (Quisiera que en mi caso hubiera sido temprano) te darás cuenta que es hora de regresar a la realidad.
Mi realidad ya no está más triste, porque mi sueño fue feliz, porque creé un “cuento de hadas” donde el príncipe y la princesa pudieron ser realmente felices, juntos.
Mi realidad es dejarte ir, pero no del todo, porque sé que aquí estaremos; no como antes, pero si como ahora. Porque serás siempre parte de mi pasado (Ese que sin miedo te entregue), de mi presente (El que se va acabando con cada letra) y quizá de mi futuro (Ese futuro que en algún momento pensé escribir contigo, ese que al no escribirlo ni en un papel pude plasmar).
Gracias por retornarme a la realidad.
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